Puertas invisibles sin bisagra

El diseño minimalista, la arquitectura esencial y la necesidad de ganar espacio han ganado terreno en la creación de nuevas puertas para viviendas. La arquitectura y el diseño actual optan por puertas con muy poco peso visual, rompiendo con la idea de puerta tradicional y apostando por una puerta con escasos accesorios, y a veces sin marcos, sin bisagras o incluso sin tiradores.

Estas puertas sin bisagras o sin marcos no renuncian a su función pero en su diseño y fabricación tiene más peso el aspecto visual para intentar crear espacios con paredes completamente lisas o puertas casi invisibles.

Así, las puertas tienden ahora a esconderse dentro de las paredes, pueden pivotar, se eliminan marcos, jambas o manijas, se crean nuevos sistemas de cierre como los magnéticos… Son puertas que se pliegan, se aligeran de peso y se reducen a la mínima expresión, con perfiles de escaso grosor (como la puerta L16 de Lualdi, con solo 16 mm de espesor) o que directamente van coplanarias a la pared.

Los fabricantes ya son conscientes de esta nueva línea de diseño y algunos como Oikos llevan ya varios años trabajando en puertas de alta tecnología y diseño que buscan esa ‘invisibilidad’. Soluciones que intentan que la puerta se convierta en un elemento constructivo que estéticamente esté integrado en el espacio.

En esta línea Oikos nos ofrece los modelos Tekno y Project en su catálogo. Ambas puertas tienen bisagras ocultas, una solución que convierte a la bisagra en absolutamente invisible cuando la puerta está cerrada. Un detalle valioso que da fuerza y esencia al diseño de la puerta.

Además, Tekno y Project, junto con sus bisagras ocultas permiten la apertura de la hoja a 100°. Esta es una ventaja particular que permite al diseñador expresar un nuevo sentido de rigor y esencialidad, destacando la línea y el acabado.